Los gatos son animales independientes y fuertes, pero eso no significa que estén libres de sufrir enfermedades. De hecho, algunas patologías son más frecuentes de lo que pensamos y, si no se detectan a tiempo, pueden poner en riesgo su salud. En esta guía, te explicaré como veterinario profesional las enfermedades más comunes en gatos, sus síntomas y, lo más importante, cómo prevenirlas para que tu felino tenga una vida larga y saludable.
1. Enfermedad renal crónica (ERC)
La enfermedad renal crónica es una de las principales causas de muerte en gatos mayores de 7 años. Se produce cuando los riñones pierden su capacidad de filtrar toxinas de la sangre.
Síntomas comunes:
• Pérdida de apetito
• Adelgazamiento progresivo
• Aumento en la ingesta de agua y micción frecuente
• Vómitos ocasionales
Prevención:
Mantener siempre agua fresca y limpia
Alimentar con dietas balanceadas y de buena calidad
Revisiones veterinarias anuales para detectar problemas renales temprano.
2. Gingivitis y enfermedad periodontal
Muchos dueños no prestan atención a la salud dental de su gato, pero una mala higiene bucal puede derivar en gingivitis, dolor y pérdida de piezas dentales.
Síntomas comunes:
• Mal aliento
• Encías enrojecidas o inflamadas
• Dificultad para masticar
Prevención:
Cepillado dental con pasta específica para gatos
Snacks dentales aprobados por veterinarios
Revisiones bucales periódicas
3. Infecciones respiratorias (Complejo respiratorio felino)
Son muy comunes, especialmente en gatitos y en gatos que viven en comunidades o criaderos. Están causadas por virus como el herpesvirus felino o el calicivirus.
Síntomas comunes:
Estornudos frecuentes
Secreción nasal y ocular
Fiebre y apatía
Prevención:
Cumplir el calendario de vacunación
Evitar la exposición a gatos enfermos
Mantener una buena ventilación en casa
4. Parásitos internos y externos
Los gatos pueden infectarse con pulgas, garrapatas, ácaros y lombrices, que pueden provocar desde picazón hasta problemas digestivos graves.
Síntomas comunes:
• Rascado excesivo
• Pérdida de pelo
• Diarrea o vómitos
• Inflamación abdominal
Prevención:
Desparasitación interna y externa regular
Mantener limpio su entorno
Revisar el pelaje después de salir al exterior
5. Obesidad felina
La obesidad no es solo un problema estético; puede desencadenar enfermedades graves como diabetes, problemas articulares y cardiopatías.
Síntomas comunes:
Aumento visible de peso
Falta de actividad
Dificultad para saltar o moverse
Prevención:
• Control de porciones y alimentación equilibrada
• Juegos interactivos para estimular el ejercicio
• Evitar darle comida humana
6. Feline Lower Urinary Tract Disease (FLUTD)
Es un conjunto de problemas urinarios que pueden incluir cálculos, inflamación de la vejiga y obstrucciones urinarias.
Síntomas comunes:
• Dificultad para orinar
• Orinar fuera de la caja de arena
• Presencia de sangre en la orina
Prevención:
- Mantener hidratación adecuada
- Alimentación especial para la salud urinaria
- Evitar el estrés, ya que puede agravar la condición
7. Virus de la Inmunodeficiencia Felina (VIF)
Similar al VIH en humanos, el VIF afecta el sistema inmunológico del gato, haciéndolo más vulnerable a infecciones.
Síntomas comunes:
Pérdida de peso
Infecciones recurrentes
Fiebre
Prevención:
Evitar peleas entre gatos (el virus se transmite por mordeduras)
Mantener al gato dentro de casa
Testear a nuevos gatos antes de introducirlos al hogar
Recomendaciones generales para prevenir enfermedades en gatos
1. Vacunación al día: es la primera línea de defensa contra virus peligrosos.
2. Chequeos veterinarios anuales: ayudan a detectar enfermedades antes de que se agraven.
3. Alimentación de calidad: un gato bien nutrido tiene mejores defensas.
4. Ambiente libre de estrés: los gatos estresados son más propensos a enfermar.
5. Atención a cambios de comportamiento: cualquier alteración puede ser señal de un problema de salud.
Cuidar la salud de tu gato no solo significa reaccionar cuando está enfermo, sino también prevenir. Las enfermedades felinas más comunes pueden controlarse con revisiones periódicas, una buena alimentación y un entorno seguro. Un gato bien cuidado es un gato feliz, y un gato
feliz vive más años junto a ti.